Facturar es uno de los trámites más comunes y habituales de todo autónomo y empresario. Pero también puede llegar a ser uno de los más complicados. Los datos, el sello, el desglose de los impuestos… ¿Conoces los tipos y elementos fundamentales de una factura? Te lo explicamos en esta infografía.

La importancia de una buena factura

Recibir una factura incompleta o errónea está al orden del día, ya sea por falta de datos del emisor o el receptor, porque el tipo de impuesto no esté especificado o que la realización del pago no haya quedado concretada. Las facturas son documentos vinculantes fiscal y legalmente para ambas partes de la operación comercial. Además, suponen un elemento fundamental para el trabajador autónomo y freelance, que ha de justificar su actividad empresarial y económica mediante dichas facturas. Por ello es de suma importancia que se realicen correctamente.

Las facturas deben realizarse en el momento de la transacción. Sin embargo, si el destinatario es un empresario o profesional, el documento se expedirá en el plazo de un mes desde la realización de la operación comercial. Desde el año 2013, el ticket, admitido para valores de hasta 3.000 IVA incluido, fue sustituido por la factura simplificada. Actualmente, el medio más utilizado es el digital, dando lugar a la factura electrónica o e-factura.

En la siguiente infografía encontrarás una clasificación de los tipos de facturas que existen en el sistema español y una descripción de los elementos, datos e información necesaria para realizar dicho documento correctamente.

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